Política Trabajo

El Gobierno pone en riesgo la continuidad de los Espacios para la Memoria

Durante la última dictadura militar existieron al menos 814 sitios en los que se secuestró, torturó y asesinó de manera ilegal y clandestina. Estos espacios fueron recuperados en democracia y se constituyeron como Sitios de Memoria para conocer la historia y las historias de los y las sobrevivientes. El Gobierno nacional resolvió despedir a una gran cantidad de trabajadores y trabajadoras de estos espacios y de esta forma, poner en riesgo su continuidad. Esta disposición se suma a otras decisiones que buscan desarmar el proceso de memoria, verdad y justicia.

Nelson, trabajador despedido del espacio para la memoria Virrey Cevallos, se refirió a la situación y afirmó que, «en el sitio Virrey Cevallos, que es uno de los cinco espacios de memoria de la Ciudad de Buenos Aires, hasta el 1° de julio éramos 10 trabajadores que cumplíamos diferentes funciones en áreas de educación, conservación, transmisión e investigación, y hoy en día esa planta se vio reducida a la mitad y 5 compañeros y compañeras que tenían contrataciones de tipo Artículo 9, que eran contratos precarios que veníamos arrastrando de gestiones anteriores a partir de la pérdida de autonomía de los espacios de memoria en el año 2014 al quedar bajo la órbita del Ministerio de Justicia que fue quien dio de baja los contratos hoy. Esto está pasando en el resto de los espacios de memoria de la Ciudad de Buenos Aires y en los que dependen de la Dirección Nacional de Sitios que están en todo el país».

Tal como explicó Nelson, el proceso de despidos implicó que se modifiquen los periodos de contratación.»Teníamos contratos anuales con las gestiones anteriores y con la gestión actual se hicieron por 3 meses a partir de enero y una sucesiva prórroga a partir de abril», comentó el trabajador del Sitio de memoria Virrey Cevallos, «en el medio, durante esa contratación de 3 meses, se dieron de baja muchos otros contratos de los cuales algunos se lograron reincorporar y hoy estaríamos en esa segunda etapa donde otros tantos quedaríamos afuera. Se que hay instancias de negociación, se cayó una reunión la semana pasada pero la idea es plantear las necesidades de los sitios a las autoridades y que se logre la reincorporación de las y los trabajadores».

La ley 26.691 insta al Estado nacional a comprometerse con la señalización, preservación y difusión de lugares en los que funcionaron centros clandestinos o sucedieron crímenes de lesa humanidad durante la dictadura y en sus años previos. Sin embargo, «por la falta de personal también se ve afectada directamente la preservación de los espacios, de ese área la mayoría está quedando afuera», comentó Nelson y añadió que, «tampoco se va a poder recibir a las escuelas y hacer la tarea de transmisión pero lo que sucede con los sitios, y con Cevallos particularmente es que, este año se cumplen 20 años de la recuperación en septiembre que fue un proceso que se dio desde la sociedad. El lugar se recupera, no por decisión de un gobierno o del Estado, sino por la demanda social que durante los años de impunidad pos dictadura sostiene la demanda de la memoria la verdad y la justicia. Después del 2001 se logra el reconocimiento y la recuperación del lugar. De algún modo, también es la sociedad la que determina el funcionamiento de los espacios porque en los espacios de la memoria confluyen un montón de actores sociales de los territorios».

Los despidos y el riesgo de cierre de los espacios de memoria fue denunciado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por la Red de Sitios de Memoria Latinoamericanos y caribeños. El trabajador del Sitio Virrey Cevallos comentó que esta denuncia «tiene que ver con una acción más en el plano internacional apelando a los tratados firmados por Argentina en Naciones Unidas. Es una acción más dentro de las que se pueden encarar en el plan internacional. Es parte de lo que se viene haciendo desde el colectivo de trabajadores que es tratar de poner el tema en las agendas internacionales».

Hasta el momento, tanto trabajadores y trabajadoras como la representación gremial aguardan con expectativa que se reprograme la reunión suspendida para una mesa de negociación que permita la reincorporación de quienes sufrieron el despido.

Producción: Eso que falta