Política Trabajo

Emergencia salarial en las universidades nacionales

Después de medio año de reclamos y a dos meses del acuerdo unilateral con el Ministerio de Capital Humano por un incremento en el presupuesto de funcionamiento, el Consejo Superior de la UBA declaró la «emergencia en materia salarial» frente a una pérdida del poder adquisitivo de los salarios del 40 por ciento durante el primer semestre del año. En ese contexto, el plenario de Secretarias y Secretarios Generales de la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU) anunció un posible paro de 72 horas en el inicio del segundo semestre y una nueva marcha universitaria en septiembre. La declaración de emergencia salarial incluye a todos los trabajadores y trabajadoras del sector, incluyendo docentes y no docentes, profesionales de la salud y tareas vinculadas a investigación y extensión universitaria.

A 5 meses de una larga lucha con paros, clases abiertas, clases públicas y la masiva marcha del 23 de abril las universidades nacionales vuelven a estar en riesgo por falta de presupuesto. Ricardo Manetti, decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, se refirió al conflicto afirmó que «luego de esa movilización se planteó la posibilidad de que ingresara una partida extraordinaria para pagar los gastos de funcionamiento. Pero esa partida con un incremento del 270% solo se le dio inicialmente a la UBA, en realidad solo salió la resolución para la UBA y más tarde para el resto de las universidades nacionales, pero no alcanza ese valor del 270%. También hay que decir que si bien esa resolución salió todavía no han llegado en algunas facultades la partida correspondiente a esos gastos de funcionamiento, a lo cual ahora se suma esta instancia que venimos peleando a lo largo del año, que hablábamos de un alerta salarial para ahora plantear la emergencia salarial».

La emergencia en materia salarial alcanza a todo el sector, explicó Manetti y comentó que «esto afecta a todos los trabajadores y trabajadoras del ámbito de los hospitales universitarios también. El tema de la salud nuevamente vuelve a estar en jaque al igual que la educación. Hoy cuando uno se plantea el servicio de las guardias se vuelve insostenible frente a estos salarios. En el caso de los no docentes algunos están bajo el nivel de la pobreza y también en el caso de los docentes, aquellos que tiene pocos años de antigüedad, o quienes no tienen dedicación exclusiva o semi exclusiva atraviesan una situación muy terrible, pensando en los gastos que tiene cualquier persona movilizándose, los gastos de transporte, de alimentos, vivienda. La situación se ha vuelto insostenible para todos y todas».

Por todo esto, el decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, informó que «el plan de lucha va a continuar. Los gremios están trabajando con las bases con la posibilidad de que no comience el segundo cuatrimestre y hacer una gran movilización como fue la del 23 de abril convocando para finales de agosto o comienzo de septiembre. Está en peligro el comienzo de las clases. No podemos plantearle a los trabajadores y trabajadoras, tanto docentes como no docentes, que se movilicen a un espacio donde, en algunos casos, esos sueldos están bajo la línea de pobreza».

Producción: Algo con erre

Foto: Facultad de Ciencias Exactas UBA