La pobreza llegó a 52,9% en el primer semestre del año, es decir, alcanza a casi 25 millones de personas en todo el país, según el INDEC. Se trata del índice más alto desde 2004 y es la primera medición de pobreza que sólo abarca a la gestión de este Gobierno. Esto implica una suba de más 11 puntos porcentuales respecto al cierre del año pasado y una suba de casi 13 puntos en la comparación interanual. Nunca hubo un salto así de brusco en 6 meses.
Laura Lonatti, Coordinadora del Área de Salud Colectiva del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCi), se refirió al tema y comentó que en «nuestro instituto de investigación lleva adelante la construcción de indicadores populares con un proceso de lo que definimos como investigación – acción participativa donde capacitamos a los actores territoriales, vecinos y vecinas de los barrios como investigadores para la transformación. A lo largo de estos últimos 14 años nosotros hemos construido estos indicadores populares que los que nos permite es visibilizar en tiempo real situaciones de vulneración de derechos. Esa construcción la llevamos en forma permanente, no cortamos la serie, por lo tanto, nuestro indicador barrial de precios que se mide mensualmente en todos los barrios populares de 20 provincias es lo que nos permite analizar la variación de precios en esos mercados de cercanías».
Lonatti también informó que desde ISEPCi «llevamos adelante en forma anual el indicador barrial de situación nutricional ya que, estamos dando inicio en el mes de octubre al relevamiento de talla y peso que hacemos en forma anual y que nos permite visibilizar la situación de mal nutrición que se encuentran los niños, niñas y adolescentes pero que concurren a comedores y merenderos. No lo hacemos a nivel de la población en general, sino que nos enfocamos en aquel universo que lamentablemente está atravesado por las situaciones de pobreza e indigencia que se han publicado la semana pasada».
A su vez, la especialista explicó que «los datos que publica INDEC tienen que ver con cómo se vincula la situación de ingresos de los hogares en relación a las posibilidades de acceder a 2 canasta: la básica total que incluye no solo alimentos, también una cantidad de bienes y servicios que requieren las familias para cubrir sus necesidades básicas; y por el otro lado, la canasta básica alimentaria que es aquella que establece cuánto dinero requieren estos hogares para poder cubrir una canasta de 57 productos que se consideran que aportarían algún aspecto básico de nutrientes que les permiten desarrollarse».
«Estamos hablando que, la medición que publica la semana pasada el INDEC para analizar el primer semestre 2024, esos valores del 52,9%, 15.700.000 personas, que estarían en situación de pobreza no estarían logrando cubrir esa canasta básica de casi $700.000», afirmó la investigadora de ISEPCI. «En el caso de la indigencia ese 18,1% son 5.400.000 personas que no llegan a reunir $349.000 que les permitiría comprar estos alimentos básicos. En este universo de hogares es donde nosotros llevamos adelante el relevamiento y monitoreo de talla y peso. Son aquellos hogares que han visto totalmente depreciadas las posibilidades de acceder a ingresos que les permiten costear los gastos mínimos, por lo tanto, la situación y el derecho a la alimentación está absolutamente perturbado y depreciado», sostuvo Lonatti.
Por último, la Coordinadora del área de Salud Colectiva de ISEPCi concluyó en que «lo que podemos visibilizar es la mal nutrición que, es un indicador complejo que no solamente habla de privaciones o de déficit, sino que habla también de excesos de alimentos que no aportan nutrientes esenciales. Esto tiene una repercusión directa y determinante sobre la situación de salud, porque desde hace años se ha cronificado la mal nutrición por obesidad y sobre peso, eso son los indicadores que hoy están marcando la situación nutricional de la población argentina en general pero que, a nivel de niños, niñas y adolescentes es muy grave ya que, está condicionando el futuro. Está abriendo la puerta a enfermedades crónicas no transmisibles. Lamentablemente tenemos que decir que hay un subregistro de la situación de diabetes e hipertesión arterial, ya no es privativo de la edad adulta, sino que se está presentando a muy temprana edad».
Producción: Eso que falta